lunes, 28 de julio de 2008

DE LOS TEMAS ECONOMICOS

UNA AGENDA ERRÁTICA
Y DESENFOCADA
Por Jorge Jauri
Fuente: “LA REPUBLICA”
Lunes 28 de Julio de 2008
Me causa una extrañeza creciente como el programa de reivindicación popular se deja ganar por temas que se alejan progresivamente del centro de los problemas principales.
El programa obrero y de la propia representación política de los sectores más desvalidos demanda en términos ya groseros aumentos del mínimo no imponible del IRPF, más salarios nominales o cuanta cosa puede caber en una hoja redactada con increíble liviandad. Mientras tanto, en el país real suceden cosas que han comenzado a revertir el progreso social logrado en los últimos cinco años. Y lo más importante, a generar riesgos, concentrándose sobre los próximos años de tal magnitud que cualquier variación de escenarios futuros hace temer por una cascada de conflictividad imposible de administrar por cualquier gobierno próximo. Y no se trata sólo del defecto "reivindicativo" que dificulta la acción del gobierno en el corto plazo.
Esa plataforma va más allá aún. A vía de ejemplo valga el caso de la negociación que estaría auspiciando un acuerdo MEF con la bancada oficialista, para sacar de la Comisión de Hacienda del Senado la postergada reforma de la Ley Orgánica del Banco Central del Uruguay (BCU).
La mediatización consecuente de esa negociación consagrará una reforma irreversible del ya defectuoso estatuto del BCU; luego poco importaría que lo mudaran a las oficinas de la nueva sede del próximo Ejecutivo. Con lo cual el movimiento popular terminará de cortarse las manos para enfrentar cualquier desborde monetario de cualquier nuevo gobierno.
Pero esto ni siquiera es vislumbrado por los trabajadores y menos por la representación política de los desvalidos. Y da la sensación de que ya no es un tema en el cual quiera participar la Presidencia.
Hay sin embargo ejemplos más comprensibles del desvío bárbaro del programa. Uno de ellos es la ausencia absoluta de exigencia de equilibrios fiscales. Importa un rábano que el jueves sepamos que las cuentas públicas siguen en rojo o aumentan su déficit; importa poco o nada que un BCU, responsabilizado de cargar sobre sus estrechos hombros el peso mayor del combate inflacionario, deba aumentar diariamente unos tres millones de dólares su deuda exigible en el corto plazo.
A nadie parece importarle que ese vínculo obvio entre un aumento del 38% en dólares de importación de bienes durables tenga una contrapartida de endeudamiento familiar insostenible en tasas de crédito al consumo del orden del 35% al 60%...o del 9% al 15% en UI.... Hace unos cuantos meses el BCU había advertido que si bien el endeudamiento familiar con los banco controlados aún no era preocupante, el servicio de deuda promedio de las familias -sólo con esos bancos- se elevaría a 30% del ingreso una vez el BHU comenzara a cobrar sus fideicomisos... (¡!)
Todo ese desarreglo crece en proporción directa con el aumento de las tasas de interés. Precio principal de la economía, resultante de los-déficit en los cuales nadie repara, indicador frente al cual los defensores de los pobres reiteran su asombrosa elusión
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