EL MUNDO EN QUE ANDAMOS...

TRÁGICAMENTE

SE ACERCA
EL ONCE

de SETIEMBRE...

Escribe
HERNAN ZUNIN

Desde hace varios días y en varios canales de cable se pasan películas, documentales y hasta avisos que preparan a la audiencia para que recuerden ese triste día.

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Por casualidad o no, se pasan avances (antes se llamaban sinopsis) de las películas con vistas que sobrevuelan la ciudad desde un avión como si las cámaras hubiesen estado en alguno de los que luego atacaron a mansalva a la población civil.

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Es así que se van acercando al o los edificios que se habían elegido como blanco de los atacantes con vistas panorámicas como si fuera una película dirigida por un gran director de cámaras.
En ningún momento se muestra a la gente que está abajo distraída en sus quehaceres diarios sin tener idea de los que cientos de metros más arriba un grupo de militares, bien entrenados y aleccionados durante años en los mejores centros de reclutamiento e instrucción político-militar, pergeñaba y sin imaginar el horror que desde el cielo se descargaría sobre ellos.

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Con excusas y nombres que recuerdan a instituciones secretas de origen religioso, se fueron dando durante los días anteriores, reuniones en varios puntos del país entre militares nacionales y extranjeros, religiosos y civiles, al mismo tiempo que algunos hacían prácticas en los aviones que luego usarían para asestar el gran golpe contra los edificios céntricos de la ciudad.

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Se podría decir que este ataque cambió al mundo, que luego ya nunca más fue el mismo.
Ahora las fuerzas enfrentadas se desembozaron de toda estrategia diplomática y se presentaron tal cual eran: ambiciosos poderes invasores que se aprovecharon de toda situación local, a veces provocadas por acciones de inteligencia preparadas por ellos mismos para lograr el apoyo de las poblaciones civiles que poco sabían de los planes geopolíticos de las grandes naciones.

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Estas poblaciones luego sufrieron en carne propia los daños colaterales causados por los enfrentamientos y las políticas de destrucción de infraestructura militar y civil de países enteros.
Y los políticos fueron desplazados y los militares condujeron el poder, azuzados por los grandes capitales de las compañías internacionales y los servicios de inteligencia de varias naciones y volcaron sobre la población civil todo el horror de la guerra fraticida.

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Y esto luego se derramó en toda la región y en algunas permanece hasta hoy, disfrazados de gobiernos democráticos se agazapan los grandes capitales ignotos que dirigen tanto fábricas que construyen como ejércitos que destruyen para que ellos vuelvan a construir y volver a ganar fortunas inmensas.
Las pocas industrias locales, tanto estatales como privadas son invadidas por el capital extranjero que así se hacen de los recursos naturales y de la producción de bienes y servicios, favorecidas por leyes que dictan ellos mismos a los legisladores amanuenses para favorecerse de exenciones de impuestos, de flexibilización laboral que reducen al mínimo los ingresos de la población trabajadora, recambios en la legislación penal que ahora agrega como delito la reunión de personas, la discusión de temas políticos tanto locales como internacionales, etc.

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Son encarcelados, torturados y humillados miles de hombres, mujeres y hasta niños, secuestrados y entregados como moneda de pago por servicios prestados.
Desaparecen de la faz de la tierra, cientos y cientos de personas que osaron levantarse contra el régimen y hasta hoy no han sido encontrados la mayoría de ellas.

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CLARO QUE CAMBIÓ EL MUNDO ESE DÍA, CAMBIO LA PAZ POR LA GUERRA, CAMBIÓ EL NOMBRE DE LOS DUEÑOS; AHORA CASI TODOS SE LLAMAN CON NOMBRES INGLESES: “COMPANY”, “INCORPORATED”,etc.