jueves, 27 de marzo de 2014

LA CRISIS TERMINAL DEL SISTEMA NO IMPLICA SU FIN A CORTO O MEDIO PLAZO NI QUE SEA FÁCIL UNA ALTERNATIVA

DEMOCRACIA, SOCIALISMO 
Y VISIONES PARA EL SIGLO XXI

Escribe KATU ARKONADA (*) 
Fuente “Rebelión”25 de marzo 2014

 (*) KATU ARKONADA (España-Barakaldo, 1978) es diplomado en Derechos Económicos, Sociales y Culturales y Políticas Públicas.  Militante de la Izquierda Abertzale en Euskal Herria. Investigador y analista del Centro de Estudios Aplicados a los Derechos Económicos, Sociales y Culturales (CEADESC) Colabora con el Ministerio de Relaciones Exteriores de Bolivia...

Con el nombre  de “Democracia, socialismo y las visiones para el siglo XXI” se celebró del 7 al 10 de marzo en Hyderabad, India, un seminario internacional con partidos políticos, movimientos sociales e intelectuales  de Asia, África, Europa y América Latina. Hyderabad, es el polo tecnológico de un gigante emergente, ya con una población de 1200 millones, es capital de la región de Telengana, territorio con largo historial de presencia comunista y lucha armada que el próximo 2 de junio va a convertirse en el Estado número 29 de la India. Dentro de esta coyuntura, y con la necesidad de repensar el proyecto político de la izquierda para un nuevo Estado, se
desarrolló este seminario internacional que contó con las experiencias de partidos políticos comunistas de África y Asia, Siriza de Grecia, movimientos sociales como el MST de Brasil o intelectuales de la talla de Marta Harnecker o Michael Lebowitz, entre otros muchos. El seminario planteó varias plenarias y debates en torno a los pilares básicos para la discusión de la izquierda global en este momento histórico, el de la democracia y la construcción del socialismo, pilares atravesados por un eje transversal, crucial hoy en día, que es el de la geopolítica. Debate facilitado en la medida en que había fuerzas de izquierda de 4 continentes, con un claro enfoque Sur-Sur y todo ello enmarcado en un análisis actual de la crisis del capitalismo. En cualquier caso las crisis siempre son oportunidades para una izquierda que tiene que dotarse de voluntad de poder, y convertir esa voluntad de poder en un proyecto político de carácter anticapitalista como transición a dar paso a un proyecto bajo un horizonte socialista. Lo que diferencia a esta crisis de las dos anteriores, es que su carácter es global. ( ir a la nota completa)


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