Siguiendo con el seminario “Seguridad Social: una política de Estado imprescindible” organizado por el Instituto Fernando Otorgues en mayo de 1995, recogemos hoy el final de la ponencia del Doctor Jorge Bruni, donde hay dos elementos a destacar. Cierta diferencia en el papel de la economía, con el Dr. De los Campos y una interesante apreciación del Dr. Bruni, sobre el sistema impositivo uruguayo.
"Para terminar preguntamos: si hubiera prestaciones suficientes –hipotéticamente hablando– en materia de Seguridad Social ¿No sería posible adoptar políticas que no incidieran en detrimento e los costos salariales? ¿No podría compensarse determinadas políticas salariales con una política de suficiencia en materia de prestaciones de Seguridad Social? ¿Sería lo mismo analizar la Seguridad Social con un enfoque en el cual la financiación cumpla el verdadero objetivo que universalmente se admite desde el punto e vista doctrinario y desde el punto de vista del mundo el trabajo, es decir, el objetivo distributivo, la Seguridad Social? ¿Sería lo mismo que aplicar el actual sistema de financiación absolutamente regresivo donde tenemos el IVA más alto del mundo? ¿Sería lo mismo analizar la Seguridad Social y los costos laborales en ese entorno?
Tales preguntan que demuestran que no me deja conforma la forma como se ha analizado el tema del costo laboral y la competitividad en el marco del Mercosur.
En conclusión: creo que tanto en lo que tiene que ver con la competitividad–costos laborales como en lo que tiene que ver con la adopción de convenios multilaterales y convenios de acuerdos administrativos en materia de Seguridad Social han predominado dos aspectos. Por un lado, el predominio del enfoque económico financiero dejando de lado la necesaria dimensión social que tiene el tema porque estamos hablando, nada más ni nada menos que de derechos humanos. Por otro lado, el predominio e la formalidad dejando de lado la realidad. Como ejemplo de esto, lo que acabo de decir del convenio y e acuerdo administrativo, y el enfoque que se le ha dado al tema e costos laborales.Por eso termino como empecé: en política lo real es lo que no se ve, lo real es la sustancia y no lo formal, que es –de alguna manera– lo que se ha aprobado en los ámbitos pertinentes el Mercosur en lo que tiene que ver con las relaciones laborales
"Para terminar preguntamos: si hubiera prestaciones suficientes –hipotéticamente hablando– en materia de Seguridad Social ¿No sería posible adoptar políticas que no incidieran en detrimento e los costos salariales? ¿No podría compensarse determinadas políticas salariales con una política de suficiencia en materia de prestaciones de Seguridad Social? ¿Sería lo mismo analizar la Seguridad Social con un enfoque en el cual la financiación cumpla el verdadero objetivo que universalmente se admite desde el punto e vista doctrinario y desde el punto de vista del mundo el trabajo, es decir, el objetivo distributivo, la Seguridad Social? ¿Sería lo mismo que aplicar el actual sistema de financiación absolutamente regresivo donde tenemos el IVA más alto del mundo? ¿Sería lo mismo analizar la Seguridad Social y los costos laborales en ese entorno?
Tales preguntan que demuestran que no me deja conforma la forma como se ha analizado el tema del costo laboral y la competitividad en el marco del Mercosur.
En conclusión: creo que tanto en lo que tiene que ver con la competitividad–costos laborales como en lo que tiene que ver con la adopción de convenios multilaterales y convenios de acuerdos administrativos en materia de Seguridad Social han predominado dos aspectos. Por un lado, el predominio del enfoque económico financiero dejando de lado la necesaria dimensión social que tiene el tema porque estamos hablando, nada más ni nada menos que de derechos humanos. Por otro lado, el predominio e la formalidad dejando de lado la realidad. Como ejemplo de esto, lo que acabo de decir del convenio y e acuerdo administrativo, y el enfoque que se le ha dado al tema e costos laborales.Por eso termino como empecé: en política lo real es lo que no se ve, lo real es la sustancia y no lo formal, que es –de alguna manera– lo que se ha aprobado en los ámbitos pertinentes el Mercosur en lo que tiene que ver con las relaciones laborales
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