martes, 3 de marzo de 2009

LA VEJEZ... UN TIEMPO DE VIDA


¿COMO PROTEGER
TU CEREBRO
CON LA EDAD?

Escriben
Sandra AAMODT
Sam WANG (*)

La manera más efectiva de mantener sano tu cerebro con la edad resulta ser algo que probablemente no esperabas: el ejercicio físico. Las neuronas necesitan mucho apoyo para hacer su trabajo correctamente, y los problemas causados por un sistema circulatorio que envejece pueden reducir la afluencia de sangre que lleva oxígeno y glucosa a tu cerebro. El ejercicio regular, del tipo que hace que tu corazón lata más deprisa, es la cosa más útil que puedes hacer para mantener tus habilidades cognoscitivas a una edad avanzada.
Las personas mayores que siempre han sido atléticas mantienen, mucho mejor la función ejecutiva que las personas sedentarias de la misma edad. Esta relación podría deberse a que las personas que están más sanas tienden a ser más activas, pero no es así.
Cuando las personas inactivas hacen más ejercicio, incluso después de los setenta, su función ejecutiva mejora en cuestión de meses. Para que resulte efectivo, el ejercicio debe durar más de 30 minutos por sesión, varias veces a la semana, sin ser necesariamente intenso. (Caminar a buen ritmo da excelente resultado) Los beneficios del ejercicio parecen ser más pronunciados en las mujeres, aunque los hombres también muestran mejoras significativas.
¿Cómo ayuda al cerebro el ejercicio? Hay varias posibilidades, y todas ellas pueden contribuir al mismo efecto. En las personas mantenerse en forma hace que el declive en el volumen cortical que se da con la edad no sea tan rápido. En los animales de laboratorio, el ejercicio incrementa el número de pequeños vasos sanguíneos llamados “capilares” en el cerebro, lo que mejoraría la disponibilidad de oxígeno y glucosa en las neuronas.
El ejercicio también libera “factores de crecimiento”, proteínas que contribuyen al crecimiento de las dendritas y las sinapsis, e incrementa la plasticidad sináptica y el nacimiento de nuevas neuronas en el hipocampo. Cualquiera de dichos efectos podría mejorar la capacidad cognitiva, aunque no sabemos cuáles son más importantes. Más allá del envejecimiento normal, el ejercicio también guarda una estrecha relación con la disminución del riesgo de padecer patologías afines a la edad avanzada.
Las personas que se ejercitan regularmente durante la mediana edad, solo tienen una tercera parte de las probabilidades de desarrollar la enfermedad de Alzheimer después de los setenta, que aquellas que no hacen ejercicios. Incluso las personas que empiezan a hacer ejercicios después de los sesenta pueden reducir su riesgo hasta la mitad. ¿Por qué no nos disponemos a caminar una media hora por día?
-
(*) La doctora Sandra Aamodt es editora de “Nature neuroscience” la revista mas destacada en temas relacionados con el cerebro. El neurólogo Sam Wang es catedrático en Princeton. Esta nota es de la obra de divulgación “Entra a tu cerebro”
Se edito en Barcelona y Buenos Aires en octubre de 2008.

No hay comentarios: