AMIG@S: Por la vigencia y actualidad del material, retomamos el Blog el jueves 28. Tanto Julio Cesar Gambina como Jorge Gómez Barata, comentan hechos ocurridos en los últimos días. Recomendamos en especial el material que cierra esta edición, sobre Paraguay, con datos de sumo interés sobre realidades economicas, impositivas, sociales de ese país hermano y de la geopolitica regional. Nos vemos. FD
ENTRE CRISIS Y TENSIONES :
DATOS PARA
UNA SEMANA TURBULENTA
Escribe
JULIO
C. GAMBINA (*)
Fuente:
BLOG del autor
Publicó:
ARGENPRESS.info
25
de junio 2012
(*)GAMBINA JULIO CESAR – Dr en Ciencias
Sociales ( Facultad de Ciencias Sociales de la UBA) Profesor de Economía
Política en la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional de Rosario,
Presidente de la Fundación de Investigaciones Sociales y Políticas, FISYP, e
Integrante del Comité Directivo del consejo Latinoamericano de Ciencias
Sociales, CLACSO. También participa como miembro del Consejo Académico de
ATTAC-Argentina y dirige el Centro de Estudios Formación de la Federación
Judicial Argentina. También participa como columnista sobre Economía y
Cooperativismo en medios periodísticos de Capital Federal y del interior del
país.
Transitamos
una semana turbulenta, con muchos asuntos globales, regionales y locales para
considerar.
En el
plano global se mezclan la finalización de dos cónclaves gubernamentales que
analizaron la crisis: el G20 en México y Río+20 en Brasil.
A nivel
regional destaca el golpe institucional en Paraguay, con mucho olor a soja.
Localmente
creció la tensión entre la CGT y el gobierno.
EL
MUNDO Y SU CRISIS
Del
encuentro en México, más allá de declaraciones por el crecimiento de la
economía y el empleo, lo real resultante es la recapitalización del FMI por
456.000 millones de dólares, sin aportes de Estados Unidos y compromisos de
contribuciones sorprendentes.
Entre
otras, las de Europa con 200.000 millones de dólares, que confirma que el
salvataje es a los bancos y empresas en problemas más que atender las
necesidades de desempleados y empobrecidos por la crisis.
Más
sorprendente aún resulta el apoyo de los países emergentes, donde China se
anota con 43.000 millones; Brasil y México con 10.000 millones cada uno, e
incluso Colombia con 1.500 millones. Imaginemos esos recursos aplicados
soberanamente al desarrollo alternativo de nuestros países.
¿En qué
piensan aquellos que imaginan un buen destino de esos cuantiosos recursos en
manos del FMI? ¿Cuánto cuesta que emerja el Banco del Sur y con qué facilidad
resurge el FMI desde la existencia del G20?
En
Río+20 no puede disimularse el fracaso, aún con la colorida propuesta por una
“economía verde”, que no es otra cosa que la mercantilización de la naturaleza.
Pintar
de verde la mercantilización de la producción en curso no esconde los problemas
económicos sociales y la crisis mundial del capitalismo contemporáneo, donde se
verifica el crecimiento de la desigualdad, con millonarios más millonarios, en
el mundo y en la región nuestramericana, según Informe de la Consultora
Capgemini - RBC Wealth Management, y sin sorpresa, estos millonarios en dólares
provienen del sector minero, agrícola y energético, es decir, del negocio de
los recursos naturales, de la llamada “economía verde”.
No hay
duda que la apuesta a la industrialización trasnacionalizada de la producción
agraria y minera tiene entre sus beneficiarios a grandes corporaciones
económicas que privilegian sus beneficios por encima de la calidad de vida de
las poblaciones en que asientan sus inversiones; y aún hablando de “trabajos
verdes” la apuesta es a la reducción de los ingresos de los trabajadores, ya
que el salario es concebido como un costo que debe reducirse para enfrentar la
crisis; y ni que hablar de la depredación de los recursos naturales.
El
fracaso de Río+20 era un resultado esperado, más allá de la magnitud del
cónclave con presencias prácticamente de todo el mundo. El problema es que el
modelo productivo capitalista, aún en crisis, es contaminante, súper
explotador, depredador y destructor.
Las
cumbres populares desarrolladas en México y Brasil demandan un debate en la
sociedad para modificar el modelo productivo y de desarrollo, pensando en
soluciones alternativas.
En ese
sentido sorprende el llamamiento de los movimientos campesinos que destacan la
potencia de la producción alimentaria indígena, campesina y de agricultura
familiar, contra la segmentación irracional de la industrialización que domina
desde el paquete tecnológico inicial a la comercialización en grandes tiendas y
supermercados, que achica la diversidad de la dieta y la riqueza proteica
necesaria para una vida cotidiana.
Pero
también destaca las convocatorias realizadas a investigar el delito económico
cotidiano, especialmente con el movimiento de dinero y principalmente con la
deuda pública, gran condicionante de nuestras economías, y por supuesto
rechazar el accionar de los organismos internacionales y el salvataje de bancos
que continúan acumulando grandes ganancias a costa del empobrecimiento de gran
parte de la población.
EL
PARAGUAY “VERDE” GOLPEA
Es más,
no puede entenderse el fenómeno del golpe institucional a Lugo, el Presidente
paraguayo sin la dominación de la producción sojera que pinta de verde la
agricultura de los países del Mercosur, la región productora y exportadora por
excelencia de la oleaginosa y sus derivados.
Horas
previas al golpe, en una potente denuncia, el periodista paraguayo Idilio
Méndez anticipaba el “duro revés a la izquierda, a las organizaciones sociales
y campesinas, acusadas por la oligarquía terrateniente de instigar a los
campesinos; avance del agronegocio extractivista de manos de las
transnacionales como Monsanto, mediante la persecución a los campesinos y el
arrebato de sus tierras y, finalmente, la instalación de una cómoda platea para
la los oligarcas y los partidos de derecha para su retorno triunfal en las
elecciones de 2013 al Poder Ejecutivo.” (1)
Todavía
no se había producido el golpe, pero había claridad sobre quienes había provocado
la maniobra que terminó con la muerte de 18 personas, policías y campesinos, y
que el poder endilgó a Lugo para destituirlo en pocas horas, poniendo en
discusión la debilidad de las democracias en nuestra región.
Los
campesinos ocupan tierras ante la creciente ocupación terrateniente, de
paraguayos, y vecinos, especialmente brasileños (brasiguayos), todos
sustentados en el paquete tecnológico de las transnacionales de la alimentación
y la biotecnología con Monsanto a la cabeza. Es algo para pensar en el conjunto
de los países del Mercosur.
Queda
el interrogante si Paraguay se sumará a la experiencia de Honduras, que luego
de fuertes declaraciones críticas de los gobiernos, el golpe institucional
finalmente se abrió camino. El gran interrogante será la movilización popular
que eludió el presidente destituido.
El
cambio político en la región tiene el límite del poder económico, lo que supone
una lección a considerar, que si no se afecta estructuralmente ese poder,
enfrentándolo con otro poder (anti capitalista), para otra ecuación de
beneficiarios y perjudicados, el sistema capitalista retoma la iniciativa y el
rumbo de la acumulación.
No solo
se trata de derechas, izquierdas o centro izquierdas, sino de orientación del
rumbo económico; si afirmando las tendencias de la acumulación capitalista en
curso más allá de la crisis mundial, o promoviendo rumbos alternativos al
capitalismo.
Queda
claro por la experiencia reciente que el poder económico no solo recurre a las
armas en su iniciativa política, aunque tenga el apoyo de las crecientes bases
militares en la región, la aplicación generalizada de leyes antiterroristas y
otros mecanismos de intromisión e incidencia; pues con los medios de
comunicación y las formas que asume la democracia representativa (poder
ejecutivo, legislativo y judicial) mantiene la hegemonía del régimen del
capital.
EL
CONFLICTO ES POR
APROPIACIÓN DE LA RIQUEZA SOCIAL
La
discusión es por las riquezas. Es lo que se discute en la coyuntura de la
Argentina. Es un debate sobre la riqueza y la pobreza.
Un
reciente estudio de Flacso da cuenta que en la última década la tasa de
ganancia es altamente superior a la de la década anterior, la del menemismo.
(2)
El
promedio de la tasa de ganancia durante el 2002-2010 alcanzó al 37,2%, mientras
que entre 1993-2001 fue del 24,8%. En los últimos años se verifica un
porcentual de ganancia mayor al 50% que en tiempos del menemismo.
¿Cómo
se explica ello? En economía no hay magia, en todo caso la riqueza cambia de
bolsillo. El documento lo explica con la disminución de los salarios y el
incremento de la productividad.
Esa es
la razón de la recurrencia en el debate sobre distribución del ingreso, porque
aún bajando el desempleo del 22 al 7% en una década, no solo se está por encima
de la media de los años previos, los 80´, y ni hablar de los 70´, sino que se
trata de una recuperación del empleo sobre la base de ingresos disminuidos
históricamente, y ganancias en alza.
La
turbulencia de la semana, con opiniones políticas muy diversas, sobre quien
juega el partido que pretende la derecha, el conflicto continuará ante la
convocatoria a movilización de la CGT, con un tema sensible para el debate: el
aporte de los trabajadores al financiamiento del Estado vía impuesto a las
ganancias.
Tal
como señalamos para el caso paraguayo, si no se afectan los intereses del poder
económico, este retoma la iniciativa política para asegurar su utilidad, y con
ella el modelo de acumulación.
Sea por
las cumbres globales o la experiencia paraguaya, en la Argentina se abre paso
la discusión sobre el modelo económico y el rumbo político, es decir, sobre el
modelo productivo y de desarrollo, tanto como sobre el gobierno del capitalismo
local, incluso, una perspectiva alternativa.
No es
una cuestión de apoyo o crítica al gobierno, sino de la orientación de la
política económica y la estructura de dominación que surge de allí, con el
interrogante de si es posible consolidar un rumbo por transformaciones
profundas, estructurales, contra la ganancia y por los ingresos populares.
Notas:
1)
Idilio Méndez; “Monsanto golpea en Paraguay: Los muertos de Curuguaty y el
juicio político a Lugo”.
2) Pablo Manzanelli, “La tasa de ganancia
durante la posconvertibilidad. Un balance preliminar”, en: http://www.apuntesparaelcambio.com.ar/apc_n3.pd
No hay comentarios:
Publicar un comentario