lunes, 14 de enero de 2013

QUERÍA OFRECER POR VEZ PRIMERA LA OPORTUNIDAD DE OÍR LAS EXPERIENCIAS DE LOS VIETNAMITAS NORMALES Y CORRIENTES.SI SUPIERAN DEL SUFRIMIENTO QUE LA GUERRA CAUSÓ AL PUEBLO DE VIETNAM, ¿CREE VD. QUE LOS ESTADOUNIDENSES SE COMPADECERÍAN DE NOSOTROS?

SUFRIMIENTO QUE SE IMPONE A LOS PUEBLOS DEL MUNDO 
“HA MUERTO TANTA GENTE…”

Escribe NICK TURSE (*) Periodista y escritor de EE UU – Fuente original “TomDispatch.com” Publica “Rebelión” Traducido del inglés   por Sinfo Fernández - Lunes 14 de enero 2013 -

 (*) NICK TURSE (EE UU 1935) - Editor asociado de “TomDispatch.com” . Laureado periodista, publica en “Los Angeles Times”, “The Nation” y en “TomDispatch”. Es escritor con varios libros editados con éxito. El último  es “Kill Anything that Moves: The Real American War in Vietnam ” (The American Empire Project, Metropolitan Books). El presente artículo es la última parte de su serie acerca del cambiante rostro del imperio estadounidense, proyecto financiado por la Fundación Lannan. Pueden seguirle en Tumbrl

Al principio de la guerra de Irak  y en los años que siguieron, expertos, veteranos y políticos se preguntaron si la debacle  en el Sureste Asiático se repetía. ¿Habría “ otro Vietnam ”? ¿Se convertiría en otro “ atolladero ”? Lo mismo puede decirse de Afganistán. años después del 11-S y como esa guerra también se ha ido a pique, las preguntas sobre el “ Vietnam de Obama ” empezaron a plantearse. Y una mayoría creía que estaba “ convirtiéndose en otro Vietnam ”.Las comparaciones objeto de debate entre las dos guerras en curso y la guerra que de alguna forma nunca se fue, llenaron de basura los periódicos, revistas e Internet, hasta que David Petraeus, un alto general COINdinista  fue llamado para resolver el asunto poniendo a trabajar esas lecciones a fin de ganar las otras dos guerras. Sin embargo, a pesar de toda la tinta vertida acerca de las “ analogías con Vietnam ”, prácticamente ninguno de los expertos, historiadores, generales, políticos u otros miembros de las clases intelectualoides se refirió nunca a la Guerra de Vietnam de la misma forma en que lo hizo Pham To. Así fue como se las arreglaron para perder el único paralelismo constante entre las tres guerras desencadenadas por EEUU en los tres lugares: el sufrimiento de los civiles.

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